Édouard es un mezquino funcionario que trabaja en la seguridad social. Racista, misógino, pelota, intolerante y reaccionario, verá saltar por los aires en una sola noche las viejas costumbres a las que se aferra.
Al final de una jornada de trabajo, su jefe le pide que entregue en mano una carta urgente esa misma noche, y forzosamente obligado a abandonar la rutina, se adentra en un territorio cada vez más inhóspito, convertido en patético juguete del influjo de la luna llena...